Uso de deshumidificador industrial para cuidar cultivos grandes o caseros
Definitivamente, los patrones climáticos inciden seriamente en la reproducción de plagas esencialmente dañinas para cosechas enteras, no importando si son grandes campos de cultivo, invernaderos o huertos caseros. Al no poder controlar el clima de una región, lo mejor que se puede hacer es anticipar los posibles efectos térmicos y de saturación en las cosechas, donde el control de humedad y temperatura es fundamental, a tal grado de que en algunas ocasiones, se tenga que emplear desecantes industriales o caseros para control microclimático y ayudar a la evolución natural de vegetales y frutos.
Viento, temperatura y humedad, son preponderantes que determinan un crecimiento o disminución exponencial de insectos en una región. En temporadas cálidas y húmedas o en regiones con ese clima constante, suele ser el ambiente ideal para todo tipo de plagas, que la mayoría de estos al ser de sangre fría, su regulación térmica será con base en dichos factores.
Muchas de las plagas suelen desarrollarse más rápidamente cuando la temperatura oscila entre los 29 y 32°C, con ciclos de vida de dos semanas. La saturación atmosférica influye desde dos principales fuentes, la comida de tales insectos y el clima circundante.
En ese sentido, es importante que invernaderos y grandes campos de cultivo cuiden mucho este aspecto, si no se quiere lidiar con molestas especies que afectan directamente a la lechuga o melón, absorbiendo sus nutrientes y humedad de manera constante, desde etapas larvarias.
El control microclimático es fundamental en estas áreas de cultivo, por lo que se tiene que contar con un buen sistema de extracción para remover exceso de humedad y en caso de necesitarlo, deshumidificadores industriales para regular la temperatura y saturación, en puntos necesarios, sin llegar a afectar la naturaleza higroscópica de plantas y vegetales.
Lo mismo va para todos aquellos que cuentan con huertos en casa, ya sea a través de macetas en tierra o por medio de cultivos hidropónicos. Si se empiezan a notar plagas, es posible que se deba al mismo problema climático. Por ello, los desecantes industriales y ventilación pueden ser buena opción.
Ahora, existen otras plagas que son capaces de desarrollarse rápido incluso en condiciones más bajas, como los pulgones, los cuales solo necesitarían un rango de temperatura entre 12 y 15 grados centígrados. Estos animalitos son capaces de completar una generación en tan solo diez días, lo que supone una devastación para cultivos que cuentan con vegetales de hoja.
Asimismo, el insecto que ataca al brócoli, se desempeña mejor después del mediodía, cuando hay más calor y las temperaturas ascienden a los 35°C, que durante las primeras horas de la mañana, con 21°C. Por ello, es importante checar ese detalle en plantíos de ese tipo.
Es natural que la baja saturación atmosférica afecte seriamente en la reproducción de insectos, provocando sequedad en su sistema. Por otro lado, la lluvia suele ser también factor para su desaparición. Todo consta que estas plagas encuentren el equilibrio para su desenvolvimiento y su eventual daño a cultivos de valor. A través de control de humedad con desecantes industriales y los mismos humidificadores, es como se debe encontrar el equilibrio exacto para que no se desarrollen, sobre todo en frutos y vegetales que ya han sido cosechados y almacenados.
Cabe resaltar que el viento puede ser un catalizador de plagas, moviendo de un lado a otro, huevecillos para su posterior proliferación en ciertos plantíos. Por ello, hay que tener cuidado con los dispositivos de ventilación que hay en invernaderos y en las mismas casas.
Se aconseja revisar constantemente las predicciones meteorológicas, para prevenir la posible afluencia de insectos, de acuerdo a las condiciones de humedad y temperatura.