Desecante industrial para combatir la humedad de aguanieve por derretimiento
A veces se tiene una preconcepción errónea de que en México no se sufre el frío que se ve en otras partes, que ciertamente comparado con los vecinos del norte, pues realmente no hay comparación. Pero esto ha ido cambiando en las últimas décadas durante los meses invernales e incluso desde el otoño. Tal vez se deba al cambio climático, al proceso natural de la Tierra y otros factores más, por los cuales se puede percibir un clima más gélido en temporadas de frío.
En nuestro país, existe cada vez más una tendencia a nevadas por más pequeñas que estas sean, o cuando menos a la aguanieve, que resulta un tanto extraño para muchas personas, al momento de lidiar con tales situaciones climáticas. Una de las cosas que se pasa por alto, es la inoportuna condensación que se suele formar en puntos esenciales de una estructura, ya sea una pequeña vivienda o toda una nave industrial.
Cuidar este factor es fundamental para mantener la construcción en buen estado, y eso se logra con sistemas deshumidificadores industriales. Estos mecanismos deberían emplazarse muy bien en los equipos de climatización mecánica, como parte de toda una estructura, para poder lidiar con las condiciones climáticas, propias de los meses invernales.
Regiones mexicanas como en Sombrerete, Zacatecas, así como en municipios de Durango, Coahuila, Nuevo León, Chihuahua y en general los estados del norte, suelen lidiar con esta clase de eventualidades, donde las estructuras de las casas y edificios, sufren de los daños que puede dar una condensación por derretimiento de hielo y nieve.
Los techos son los principales puntos que se ven afectados, por lo que la instalación de desecantes industriales en sus cercanías debería ser un tema de importancia, no importando la estación del año.
No hay que caer en el error de dejar pasar estos sucesos naturales, ya que los daños por congelamiento en techos se dan de forma sistémica. Esto pasa cuando la nieve postrada en el techo se va derritiendo conforme la temperatura del edificio va incrementando por arriba del punto de congelamiento. Este derretido se va filtrando de forma más profunda, pasando por las capas estructurales de techos y muros; es prácticamente un ciclo que va afectando capa por capa de una casa o edificio, dañando de manera seria la construcción.
Con una muy buena impermeabilización y trabajo de pintura, debería bastar para la protección de una edificación cualquiera, sin embargo, no hay que tomar a la ligera la condensación que se va formando de manera profunda por toda una estructura.
Hay que acudir a un especialista en humedad, para que dé un buen diagnóstico de lo que está pasando en una nave industrial o en un complejo con oficinas. Asimismo, habrá que acudir a aparatos especializados para el tratamiento de saturación atmosférica excesiva, como desecantes industriales, entre otros.
Las consecuencias por acumulación de nieve o aguanieve son varias, desde un daño en techos, que los haga colapsar y ser un peligro para transeúntes o vehículos. Se han suscitado incidentes de ese tipo, por no poner atención a dichos detalles.
No proveer un tratamiento antihumedad adecuado durante nevadas o heladas, así como la instalación de deshumidificadores portátiles o fijos, podría bloquear conductos de ventilación o las mismas chimeneas, desencadenando aspiración de monóxido de carbono que se ve acumulado, intoxicando a cualquier persona dentro de un determinado recinto.
El deshielo no es cuestión de broma, porque también se corre el riesgo de que toda esa condensación filtrada, llegue a conexiones eléctricas que no estén en buenas condiciones, causando cortocircuitos demasiado peligrosos para cualquier vivienda.
Los deshumidificadores industriales o caseros, son componentes perfectos para el hogar, que pueden ser portátiles o instalados con todo el sistema de climatización; solo es cuestión de hacer una buena instalación.