Supervivencia de virus y bacterias por alta humedad y temperatura en entornos de trabajo
En entornos industrializados, crear un ambiente respirable y sano para trabajadores y clientes puede resultar más complicado de lo que se piensa, y es que, hay una implicación en sistemas robustos de climatización empresarial, como los ‘chillers’ (aire acondicionado), o los mismos sistemas de deshumidificación. Es normal que haya gastos excesivos
energéticos para esta clase de aparatos, sobre todo sabiendo que muchos deben funcionar las 24 horas durante los 365 días del año. Para que haya un ahorro monetario y no se contamine de más con el uso de climatización industrializada, se pueden hacer varias cosas.
Por ejemplo, en el caso de los deshumidificadores industriales, se recomienda que operen a la par de humidistatos o paneles de control de humedad, para que haya una dosificación constante de estos mecanismos, con apagados automáticos cada vez que se llegue a un parámetro deseado, y así no maximizar o minimizar los rangos térmicos que son los ideales para un entorno de trabajo. Además, será de gran ayuda para disminuir los picos energéticos de cualquier sistema de climatización, empezando por el deshumidificador industrial.
Los estudios de supervivencia microbiana constantemente estudiados por especialistas, arrojan que hay virus que pueden desaparecer en cuestión de segundos en una determinada superficie, pero habrá otros que son capaces de durar por meses. Ahora, los parámetros de humedad y temperatura decidirán en gran medida, la supervivencia de virus y bacterias en un entorno con mucha gente, como naves industriales, edificios con oficinas y complejos comerciales. Es normal que muchos de los virus no sobrevivan a ambientes cálidos, pero la otra cara de la moneda, es que entre más alta humedad y temperatura, es muy probable que aparezcan microorganismos dañinos para el ser humano, como lo puede ser el moho negro tóxico, entre otros patógenos peligrosos.
Además, también cuenta mucho el tipo de material o superficie que existe en un entorno de trabajo. Por ello, es muy recomendable que en áreas laborales importantes, se evite el uso de fibras sintéticas en la medida de lo posible, porque
los microbios suelen asentarse con mucha más facilidad en tal material, comparado con el algodón o el mismo nylon.
En cuanto a las superficies, los microbios sobreviven muy bien en el acero inoxidable, propagándose de forma importante a lo largo y ancho; por otro lado, mueren más rápido en el cobre, por sus propiedades antimicrobianas. Asimismo, el plástico es un ambiente ideal para la formación de dichos microorganismos dañinos, pero sin duda, en recovecos y espacios de difícil acceso a una limpieza normal, suelen ser focos de infección relevantes de virus y bacterias.
Es muy importante que haya constante limpieza y desinfección en espacios con esos materiales, poniendo especial atención en recovecos. Asimismo, se recomienda que haya dispositivos deshumidificadores, con sus respectivos humidistatos, para propiciar un clima sano para trabajadores y clientes.
Los humidistatos suelen venir en dos modalidades: mecánico y digital. El primero manda señales derivadas de la interacción entre un polímero y un circuito eléctrico. El segundo posee un sensor digital con circuito integrado, que se sensibiliza ante las condiciones climáticas de un lugar, transformando las magnitudes físicas en eléctricas y así, se crean las lecturas adecuadas; se podría decir que es un sensor muy avanzado, que ayuda a que el deshumidificador industrial
tenga un desempeño mejorado, desde el punto de vista funcional y energético.
Es verdad que muchas de las bacterias que andan pululando en ambientes industriales y empresariales, son dañinas para la salud humana, pero irónicamente existen otras bacterias que son benignas para el organismo, y que de hecho estas protegen de las dañinas. Entonces no es raro que haya especialistas que recomienden no usar tanto el gel desinfectante, por lo mismo; es una disyuntiva bastante complicada.
Como sea, hay que seguir los protocolos de seguridad y sanidad, y más en entornos industrializados y comerciales, donde hay mucha aglomeración de personas, siguiendo incluso, las recomendaciones más básicas, como saludar de puños en vez de manos extendidas, ya que se encontró por medio de un estudio en la revista American Journal of Infection, que la diferencia de transferencia bacteriológica se diferencia de diez a veinte bacterias de más.